Envió a esclavos acompañados por las caravanas que iban y venían entre las dos ciudades a contar los pasos de una ciudad a otra, así como también a contar las vueltas de la rueda de la caravana y a poner cuerdas en el camino. Cuando volvieron unos cuantos mercaderes y esclavos decidió que la distancia era de 5.000 estadios.
Pero el día de la fiesta de Asuán midió la sombra de un palo y mediante varios cálculos en los que entre ellos se encontraba la medida de un estadio de los que usó Erastóstenes (157,5 m) descubrió que en sus resultados había un margen del 1,5 de error. Y aplicando este margen de error descubrió que no eran 5.000 estadios sino 4.628.
Pasen y vean, los ciegos no pagan.
Bienvenidos todos a la casa de la física.
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Muy bien.
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